Narraciones.
Proyecto.
Hoy, hoy soy un fuego que arde en su centro, que no deja nada a su paso, que todo lo destruye. No toma en cuenta a nada ni a nadie, todo perece por igual; lo único que no arde bajo mis llamas es lo que perdura, lo que es real, lo que brilla. La vida no termina, la vida no es tocada por mi fuego.
Respeto la vida real, los ideales libres, las ideas frescas, la vida. LA VIDA.
Harto estoy de la doble moral, de la falsedad de la gente, de sus pretensiones materialistas vacías.
El ser humano no vale por lo que tiene, sino por lo que es. Y el ser humano es Dios, es creación de Dios. Cuando contaminamos nuestro cuerpo, negamos la vida. Cuando contaminamos nuestra mente, alejamos la luz. Cuando contaminamos el espíritu morimos.
El ser humano, en cuanto a SER, es un privilegio, es un gozo, una gloria. Basta ya de tonterías, basta de luchar entre nosotros, de contaminar nuestros cuerpos con alcohol, basta de vivir como si quisiéramos morir, la vida es hoy.
El fuego consume mis pensamientos y mis sueños.
Estoy enojado, harto, asqueado. Todo mundo parece vacío, no hay nada dentro, son clones de lo que creen que deben de ser, actúan como lo creen debido, no razonan, no miran, no viven.
Hoy no propongo nada, no quiero. Hoy odio, hoy desprecio.
Caprichos, egoísmo, falsedad.
Hoy soy fuego, fuego que quema, que no espera, que arrasa con todo.
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