lunes, 21 de junio de 2010

Si así será el resto de mi vida, se que he sido condenado con la peor de las maldiciones humanas. De una que por más que lo intento no puedo escapar, y empiezo a creer que no existe razón para que esto pase. No sé porque he sido maldecido, embrujado...

Los días son grises para mi, las noches mi eterno refugio donde escapo por medio de las letras de este mundo terrenal y desgraciado que tanto daño me ha hecho. Odio todo a mi alrededor, porque todo tiende a dejarme, a alejarse de mi... nada es permanente en mi existencia mas que esta estúpida soledad...por las noches lágrimas corren por mi rostro en busca de una salida del mar que existe dentro de mi.

No hay comentarios: